·
La relación entra en un
bache.
·
Sigues enamorado pero
empiezas a darte cuenta que ella no es tan perfecta: tiene granitos, de repente
se pone histérica, se come las uñas, es mala para contar chistes y tiene muchas
amigas medias raras, en fin.
·
Tú también te das cuenta
que tienes mil imperfecciones.
·
Te sienes un poco
inseguro pues te da miedo decepcionarla o que ella te decepcione a ti
·
Tal vez te sigue
pareciendo preciosa pero tú también, de repente, abres un ojito para ver otra
cosa en el menú, aunque sea un postrecito.
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Surge la técnica “O” me
quieres o me quieres. Me aceptas como soy o búscate a alguien más. Casi casi te
corto o me cortas
·
En este punto la relación
puede terminar pues hay cosas que quizás no son negociables para ninguno de los
dos. Algunas broncas no se negocian ni aunque les des un año.
·
También, fríamente te
abres el corazón y te preguntas; “¿es tan grave como para terminar?”¿vale la
pena?
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